Escoger el método más apropiado para personalizar la ropa laboral, deportiva o el textil publicitario suele no resultar tan fácil y es una de las consultas que recibimos con mayor frecuencia.
Por eso, nos proponemos en este artículo, explicarte las distintas técnicas de personalización y, en que casos, puede resultar más conveniente uno u otro método de marcaje textil. La intención: ayudarte a decidir cual de ellas es la que mejor se adecua a tus necesidades.
Breve descripción de las principales técnicas de personalización: serigrafía, transfer y bordado
(existen otras técnicas como sublimación o impresión directa pero solo nos centraremos en las más habituales y versátiles)
Serigrafía: consiste en imprimir el logo, escudo o diseño empleando tinta que se fija directamente sobre tus prendas. Se utiliza una malla tensada en un marco. En las zonas donde no se debe estampar, un barniz bloquea el paso de la tinta. Todo lo restante es el diseño a imprimir, lo que se consigue haciendo presión sobre la malla tensada para que la tinta pase a través de ella y estampe el genero textil que hay por debajo. (ilustrar con una o dos fotos de las que te envío)
Transfer de vinilo textil: en este caso se aplica mediante presión y calor una delgada lámina plástica termoadhesiva que queda pegada a la prenda. Para este proceso es necesario contar con un plotter que corta y le da la forma del diseño al vinilo y una prensa térmica que permite la adherencia de la lámina. Existe una gran variedad de vinilos que permiten hacer innumerables diseños. (ilustrar con una o dos fotos de las que te envío)
Bordado: esta técnica de personalización textil consiste en bordar un logo, escudo o diseño a una prenda utilizando máquinas de bordado industrial con hilos de distintos colores y composiciones. Añade a la prenda una imagen más profesional, de calidad y es un marcaje más duradero. (ilustrar con una o dos fotos de las que te envío)
Ahora, la gran pregunta: ¿En que casos en mejor utilizar uno u otro método de marcaje para personalizar nuestras prendas?
El método de personalización que podemos utilizar para los distintos tipos de prendas es muy amplio. Las recomendaciones básicas serían las siguientes:
Serigrafía: es una técnica muy versátil, ideal para impresión de camisetas y sudaderas, aunque es aplicable a todo el abanico de prendas. Hay prendas como los polares, jerseys de punto, gorras de 6 paneles y gorros de lana por ejemplo, que no resultan tan apropiados para esta técnica y para los que el bordado ofrece una mejor solución
Como la serigrafía tiene importantes tiempos y costes de preparación (la fase de laboratorio y revelado con el desarrollo de fotolitos y pantallas) pero su coste unitario es bajo, es un método de personalización muy recomendable para grandes cantidades (digamos a partir de 100 o de 200 unidades) y menos recomendable para cantidades inferiores por el impacto económico de la preparación de pantallas y fotolitos.
Una buena opción para el caso de pocas prendas a personalizar pero en repetidas veces a lo largo del año sería encargar transfers serigráficos o de tinta plastisol y aplicarlos en cada encargo con la prensa térmica. El resultado es similar a la serigrafía pero resulta más económico porque se evitan los coste de pantallas y fotolitos cada vez que se pide una repetición. Este método de personalización es frecuentemente utilizado para la personalización de ropa laboral con logo de empresas.
Transfer de vinilo: muy utilizado cuando la cantidad de prendas a estampar es baja y por única vez, sin repeticiones constantes, por ejemplo digamos 20 o 30 prendas para una necesidad puntual como pueda ser una Feria, un congreso, una convención u otro evento especial, una despedida de solteros, etc.
Bordado: es otra técnica de marcaje textil muy versátil y aplicable a la personalización de prácticamente todo el abanico de prendas posibles. Hay prendas que por su composición, tipo de tejido u otras características especiales resultan ideales para el bordado. Los ejemplos típicos serían los polares, las gorras, en especial las de 6 paneles, los gorros de lana, jerseys de punto, camisas, chaquetas, batas sanitarias y chaquetillas de cocina. El bordado siempre aplica cuando se quiere dar más distinción y elegancia a las prendas y dotarlas de un mayor impacto visual. Más allá del aspecto visual, el bordado es además la técnica de personalización más duradera ya que resiste hasta el final de la vida útil de la prenda y admite todo tipo de lavados incluso con lejía. Es por todas estas razones que, en el caso de ropa laboral de alta gama y durabilidad suele ser lógico recurrir al bordado como la técnica de personalización más apropiada para imprimirles el logo de la empresa.
El precio unitario del bordado suele ser mayor que el de la serigrafía. Sin embargo en cantidades inferiores a 100 unidades y cuando el logo o diseño tiene varios colores, los costes de ambas técnicas de personalización textil suelen tender a equipararse.